4) PREGUNTA: ¿Hay otras pruebas indirectas en la Biblia?
Si, hay unos versículos muy interesantes.
C) “11 Todo lo ha hecho bello a su tiempo. Aun el tiempo indefinido ha puesto en el corazón de ellos, para que la humanidad nunca descubra la obra que el Dios [verdadero] ha hecho desde el comienzo hasta el fin. 12 He llegado a saber que no hay nada mejor para ellos que regocijarse y hacer el bien durante la vida de uno; 13 y también que todo hombre coma y realmente beba y vea el bien por todo su duro trabajo. Es el don de Dios.
14 He llegado a saber que todo lo que el Dios [verdadero] hace, resultará ser hasta tiempo indefinido. A ello no hay nada que añadir y de ello no hay nada que sustraer; sino que el Dios [verdadero] mismo lo ha hecho, para que la gente tema a causa de él.
15 Lo que sucede que ha sido, ya había sido; y lo que ha de llegar a ser, ya ha resultado ser; y el Dios [verdadero] mismo continúa buscando aquello tras lo cual se sigue”. (Eclesiastés 3:11-15)
Estos versículos de Eclesiastés aluden claramente a los ciclos, proyectos y destinos de la humanidad, y a la Obra de Dios (el Propósito de Dios) en contraste con la finitud humana. Eclesiastés nos habla de la “Obra que el Dios Verdadero ha hecho desde el comienzo hasta el fin”. Según los astrónomos el universo tiene más de 13 mil millones de años, como ha escrito en varias ocasiones la revista La Atalaya y ¡Despertad! La Obra Perspicacia comenta: “La existencia de Jesús como criatura celestial empezó miles de millones de años antes de la creación del primer ser humano. (Compárese con Miq 5:2.) El Padre se valió de su Hijo primogénito celestial para crear todas las demás cosas (Jn 1:3; Col 1:16, 17), entre ellas los millones de otros hijos de la familia celestial de Jehová Dios (Da 7:9, 10; Rev 5:11), así como el universo material y las criaturas que al principio se colocaron en él. Lógicamente, Jehová se dirigía a este Hijo primogénito cuando dijo: “Hagamos al hombre a nuestra imagen, según nuestra semejanza”. (Gé 1:26.)
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"Todas estas otras cosas no solo fueron creadas “mediante él”, sino también “para él”, como el Primogénito de Dios y el “heredero de todas las cosas”. (Col 1:16; Heb 1:2.)”- Perspicacia para Comprender las Escrituras. La“Obra que el Dios Verdadero ha hecho desde el comienzo hasta el fin” ciertamente se refiere a esas edades inmensas pasadas en donde el Logos colaboró con el Padre en poblar los espacios y galaxias realizando grandes tareas. Y esta Obra se mantiene hasta el fin, es eterna, nunca se detiene el proceso y proyecto de Dios. “Lo que sucede que ha sido, ya había sido; y lo que ha de llegar a ser, ya ha resultado ser; y el Dios [verdadero] mismo continúa buscando aquello tras lo cual se sigue”. Es entonces que siguiendo el contexto de todo este relato de Eclesiastés donde se nos iluminan las últimas frases. El Padre sigue buscando o trabajando en su Obra de expansión. El libro de la Sociedad Watch Tower Espíritu Santo declara: “Nuestra Tierra es una parte diminuta de un universo cuyos límites los científicos no pueden alcanzar ni llegar a ver ni siquiera con los más poderosos telescopios de hoy día. Aun así, este universo que todavía no ha sido medido no puede contener al Dios verdadero. No puede restringirlo o confinarlo. Lo que ya existe del universo actual, visto y no visto, puede ser sobrepasado por el Dios verdadero. Él puede ir más allá de éste y crear más cosas para engrandecer el universo, más allá de sus límites existentes, afuera hacia el espacio sin fin. ¿Qué significa esto? Significa que ni el tiempo ni el espacio limitan a Dios. Su vida en los tiempos del pasado no tiene límite. La duración de su vida en el futuro es ilimitada. A este Ilimitado el más prominente legislador de los tiempos de antes del cristianismo, Moisés, dijo: “Aun desde tiempo indefinido hasta tiempo indefinido tú eres Dios.” (Salmo 90:2) Este Dios vive hasta el tiempo sin fin, para seguir produciendo y creando más allá del universo actual, dándole expansión”(pág.5).
Así que está claro, Dios sigue en su obra, “buscando aquello tras lo cual se sigue”. Pero, recordemos, la Obra que el Dios Verdadero ha hecho desde el comienzo…. Su obra empezó mucho antes que nosotros. Jesús estuvo con el Padre millones de años antes de crear la tierra. Entonces cobran significado las palabras de Eclesiastés: “Lo que sucede que ha sido, ya había sido; y lo que ha de llegar a ser, ya ha resultado ser; y el Dios [verdadero] mismo continúa buscando aquello tras lo cual se sigue”.
“Lo que sucede que ha sido ya había sido”, puede ser una clara alusión a que esta obra no empezó con nosotros. Lo que sucede que ha sido (con la creación de Adán) ya había sido (¿en otros mundos?). y lo que ha de llegar a ser (el nuevo mundo y el paraíso), ya ha resultado ser (en otros mundos perfectos). y el Dios [verdadero] mismo continúa buscando aquello tras lo cual se sigue”. Jehová sigue con su propósito en marcha sin detenerse. Este Propósito es tan inmenso que la misma humanidad tendrá toda la eternidad para aprender. “Todo lo ha hecho bello a su tiempo. Aun el tiempo indefinido ha puesto en el corazón de ellos, para que la humanidad nunca descubra la obra que el Dios [verdadero] ha hecho desde el comienzo hasta el fin” (Eclesiastés 3:11). Dios ya ha hecho cosas desde el comienzo, y que aún no sabemos, y seguirá realizándolas por la eternidad, y aún así no sabremos todo. Conoceremos los asuntos de manera delicada y gradual (Prov. 4:18).
